En todos los países, los taxis representan un porcentaje no despreciable del número de automóviles que circulan por las calles. Estos vehículos están circulando por más de 6 a 8 horas al día, en gran medida sin pasajeros, con la consiguiente contaminación que generan y congestión vehicular.
Dadas las tecnologias existentes, es posible desarrollar un modelo basado en smartphones que permita llamar al taxi más cercano a la ubicación que lo requiero, simplemente oprimiendo un botón en mi teléfono. La idea es que los taxis dejen de circular vacíos y se agrupen cercanos a las zonas de mayor demanda, estacionados a la espera del próximo cliente. Es como tener una central de radiotaxis única para todos los taxis de la ciudad, automática.
Los taxis deberían estar inscritos en la plataforma, con su identificación previamente verificada, lo que daría el marco regulatorio para la operación de la plataforma y entregaría mayor seguridad al usuario que lo solicita.