El ahorro energético presenta una gran oportunidad de introducir nuevas tecnologías que aporten soluciones reales a los problemas de acondicionamiento térmico de viviendas. Proponer una solución constructiva sustentable puede ser una alternativa, pero no sin antes conocer el problema. La propuesta consiste en la creación de un catastro de materialidad de la vivienda, identificando la solución constructiva, posibles errores constructivos y deterioro que presentan las casas evaluadas para abordar de forma específica los problemas encontrados. Posteriormente, la madera se presenta como un material idóneo para implementar una solución real a través de estrategias pasivas de diseño, gracias a sus características térmicas, economía y facilidad de montaje. Así, se podrá "reforzar la envolvente" para obtener mejores rendimientos térmicos en la vivienda, como también, un ahorro significativo para las familias en el mediano y largo plazo.