Seguramente te has comido por lo menos una fruta en esta semana. Quizá por las vitaminas y nutrientes que éstas aportan, por ser un alimento práctico y fácil de llevar, porque así se los marca la dieta o simplemente por gusto. Pero, ¿qué pasa con la cáscara que queda una vez que se terminan la fruta? Todas terminan en la basura. Generamos un total de 750 millones de toneladas de residuos orgánicos cada año en todo el mundo. Esto es equivalente a llenar 35,000 veces el Estadio Azteca (México). Las cáscaras entonces son un recurso no aprovechado, nosotros en Fibra Rojas las utilizamos para convertirlas y ofreceren una nueva alternativa en cuanto a las tendencias ecológicas textiles. Así es, ¡ahora vestiremos gracias a los frutos que consumimos!