En 2015, la industria textil emitió el equivalente a 1.200 millones de toneladas de CO2, más que las que emitieron el transporte marítimo y la aviación internacional juntos, siendo la segunda más contaminante del mundo. En el mundo se producen alrededor de 80 millones de prendas, debido al consumo indiscriminado de ropa impulsado por las grandes cadenas textiles, donde más del 50% de las prendas terminan en vertederos o incinerados. Nuestra propuesta va encaminada en cambiar esta realidad llevando consciencia a miles de personas sobre el alto costo que conlleva la industria textil, impartiendo pláticas sobre el impacto ambiental de la misma, y el bienestar físico a través de productos de la salud elaborados con materiales reciclados que brindarán apoyo a múltiples comunidades de escasos recursos a través de donativos que serán entregados por cada compra realizada. Con esto queremos reducir el efecto de los gases de C02, así como la disminución de residuos textiles.