En nuestro país, 1 de 4 habitantes son adolescentes o jóvenes entre 10 y 24 años. La población adolescente y joven del país y de la región enfrenta desafíos de desarrollo, agravados y profundizados por los efectos de la COVID-19. Dichos efectos han exacerbado la violencia de género, las brechas de acceso a la salud, la carga y oportunidades de trabajo, sobre todo para las mujeres.El Presente Proyecto tiene por finalidad dar a conocer la situación de las adolescentes embarazadas o que ya son madres y tienen problemas para permanecer en la escuela y concluir su educación, con efectos negativos en su formación, en el desarrollo de habilidades y competencias psicosociales, en la posibilidad de acceder a oportunidades educativas y de trabajo futuras, en su autonomía y seguridad económica, y en su capacidad de participar en la vida política y pública.