Anualmente se desechan cerca de 8 millones de toneladas de plásticos, mismas que en su mayoría terminan en rellenos sanitarios, mares y océanos. Debido a que el plástico tarda de 100 a 500 años en degradarse, este se acumula y contribuye al problema de contaminación. Es por ello que surge la idea de reutilizar los desperdicios y desechos orgánicos como las cáscaras de frutas y verduras, para obtener bioplástico y con éste crear envases desechables 100% biodegradables y compostables después de su uso, con un tiempo de degradación de 100 a 200 días. Si bien existen pocas alternativas biodegradables en el campo de los envases desechables, la gran mayoría de ellas compromete las fuentes de alimentos para la elaboración de dichos productos. Ecoplaso es una alternativa biodegradable a los productos desechables de consumo cotidiano tales como cubiertos, vasos, platos y popotes, misma que al reutilizar los desechos orgánicos, no compromete la seguridad alimentaria.