Esta idea plantea crear e implementar una instancia permanente (Centro) para enfrentar el problema de conductas antisociales en la educación básica y media. En una primera etapa cubriría la región de Antofagasta y en una segunda etapa la región de Arica y de Iquique. Para ello, el responsable de esta idea (Ph.D.) tiene el respaldo del Instituto de Violencia de la Universidad de Oregon. El potencial Centro estaría constituido por un equipo directivo y un consejo asesor externo, con representantes de direcciones de educación y corporaciones educacionales. Las actividades del Centro consistirían en: capacitación de docentes y funcionarios de los establecimientos educacionales; programas de intervención pedagógica para la gestión integral, desde la sala de clase hasta los espacios recreativos; asesoría permanente de especialistas; estudios e investigaciones para el mejoramiento de la convivencia escolar; Diplomas o Certificaciones para docentes, en coordinación con el Instituto de Oregon.