Nuestra propuesta comenzó como un proyecto de preparatoria por parte de 4 alumnos. El proyecto es específico a una necesidad particular en los hospitales públicos, específicamente en zonas de bajos recursos. Nuestra co-fundadora Mariana vivió el problema cuando su abuelo estuvo internado en la clínica 17 del seguro público. El hospital no permite que las personas con teléfono celular lo carguen, ya que el voltaje no es suficiente para mantener lo básico del hospital y proporcionar enchufes a los familiares en sala de espera. Nuestra solución fue manufacturar 100 pilas recargables con materiales que nosotros mismos compramos y regalarlas a la clínica 17, con la que establecimos contacto previo. El proyecto lleva más de 1 año funcionando y estamos buscando vender pilas al público para financiar nuestro lado caritativo. Actualmente somos una de las iniciativas seleccionadas para el programa Changemakers de Ashoka, un programa de tutela con el que buscamos expandir el alcance de la idea.