El proyecto A.M.I se basa en la asistencia inmediata a personas que estén sufriendo un paro cardío pulmonar, mediante el uso de un dron que puede llegar a ir desde los 80 hasta los 500 km/h (dependiendo del dron) en línea recta al lugar del hecho, llegando mucho antes que una ambulancia. Este va a estar equipado con un DEA (desfibrilador externo automático) que es muy simple de usar, sin dejar de ser muy efectivo porque lee automáticamente la arritmia y aplica la descarga eléctrica según su propia lectura, también está la ayuda de la púlsela la cual la van a poseer aquellas personas que tenga riesgo de sufrir un infarto ( o simplemente aquellas que quieran ser precavidas) ya que está ayudaría en la detección anticipada del paro y avisaría a las autoridades para ir en auxilio de aquella persona. Sería adecuado que los drones se encuentren en las salitas barriales para que todos los sectores estén bien cubiertos y puedan llegar en el mismo tiempo en todos los lados.