El proyecto consiste en desarrollar tres botes de basura inteligentes con cámaras y sistemas de reconocimiento de imágenes que clasifican automáticamente los residuos en orgánicos e inorgánicos. Cada bote se abre automáticamente dependiendo del tipo de basura que la cámara capture. El objetivo es mejorar la gestión de residuos, automatizando la separación y promoviendo el reciclaje. Esto reduce errores humanos, aumenta la eficiencia y contribuye a la sostenibilidad ambiental. Los beneficios incluyen una mayor eficiencia en la clasificación de residuos, promoción del reciclaje, reducción de la contaminación y el fomento de tecnologías avanzadas. La implementación se realizará en fases: diseño y desarrollo del prototipo, pruebas y ajustes, y despliegue y evaluación en un entorno real. Este proyecto facilita la correcta disposición de desechos, disminuye el impacto ambiental y fomenta el desarrollo de soluciones inteligentes y sostenibles.